El Sabinar, comenzó a ser construido en mayo de 1956, pero no fue habitado por los primeros colonos hasta diciembre de 1962. Fue bautizado con dicho nombre con motivo de la flora que poblaba esa zona, la sabina negra; que aún se puede encontrar a lo largo de la bardena aragonesa.
Fue el último de los pueblos colonos de las Cinco Villas en habitarse; muchas de las familias colonas que se trasladaron hasta El Sabinar, procedían de Novillas, Ejea de los Caballeros, Gallur, Alfocea, Santa Isabel, Uncastillo y Tauste. Esto hizo que se convirtiera en el pueblo con colonos procedentes de más localidades, haciendo que ningún lugar de origen predominara por su gran número de colonos. En su día, se construyeron un total de 126 viviendas y poblaron la localidad 113 colonos.
Tiene una superficie de 44.83 km² y una población cercana a los 200 habitantes.

